La Intendencia de Montevideo detectó que la falta de mantenimiento de los camiones recolectores es el principal problema al que se enfrenta en estos momentos para realizar la tarea de manera «óptima» y por eso decidió convocar a una reunión de carácter urgente para saber cuál es la situación de cada una de las unidades.
La comuna tiene unos 40 camiones recolectores, pero solo utiliza el 60% de la flota. El resto de las unidades no se usan debido a que están rotas o les falta mantenimiento.
«Siento que estamos bastante más atrasados de lo que deberíamos estar con las condiciones que tenían que tener hoy la gran cantidad de camiones», expresó a El Observador el director de Desarrollo Ambiental, Óscar Curutchet.
La semana pasada se generaron retrasos en la recolección de residuos y se retrasó el vaciado de unos 1.000 contenedores. La comuna atribuyó la demora a los paros distorsivos realizados por la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom), aunque el sindicato se quitó responsabilidad y consideró que el problema era fundamentalmente el estado de las unidades. Ambas partes se reunieron este lunes para dialogar sobre el tema y para buscar la manera de solucionar el conflicto.
El intendente Daniel Martínez definió como prioritaria la inversión en Limpieza este quinquenio, por lo que Desarrollo Ambiental contará con $ 375 millones para invertir en los primeros tres años de gestión. El dinero se utilizará para comprar 20 camiones recolectores y 6 mil contenedores para renovar los que se encuentran en mal estado.
Hace dos meses se creó una comisión asesora de licitaciones para comprar los primeros diez vehículos, que la intendencia espera tener en sus manos para mediados del año que viene.
Sin embargo, Curutchet reconoció que necesita «hincar el diente» al mantenimiento de los camiones y por eso mantendrá una reunión este miércoles con la división Limpieza para conocer «de manera cabal» cuál es el estado de cada una de las unidades y cómo se distribuyen las tareas mientras los nuevos camiones no lleguen.
«Quiero un diagnóstico real de cómo estamos parados en cada una de las regiones (este y oeste), cuál es la situación de mecánica, de gomería, de electricidad y cómo van a ser las tareas. Si hay que cambiar turnos, modificar algunos aspectos de operativa, lo vamos a hacer y vamos a tomar las decisiones políticas que haya que tomar», expresó el director de Desarrollo Ambiental.
Según Curutchet, el aumento de la cantidad de contenedores (que pasó de 8 mil a 11 mil en la administración anterior) no fue acompasado por un aumento en la cantidad de camiones recolectores disponibles, y eso es lo que entiende que está distorsionando la tarea.
«Cuando nosotros llegamos hicimos cambios en las direcciones de cada uno de los servicios. Y eso mejoró la operativa de recolección», señaló a El Observador el jerarca, que además aseguró que en la encuesta de setiembre contratada por la comuna la aprobación en la recolección de residuos pasó del 36% al 51% en los primeros meses de gestión.
De todos modos, el director de Desarrollo Ambiental consideró que la mejoría será «sustancial» cuando la intendencia logre tener operativos los nuevos camiones.