Mientras en Brasil y Argentina se recupera el 90% de los envases de agroquímicos empleados en el campo, en Uruguay esa cifra llega apenas al 15%.
En Guichón (Paysandú), vecinos han denunciado en forma reiterada la aparición de envases con residuos peligrosos esparcidos sin ningún tipo de cuidado sobre el vertedero, y también en arroyos y cañadas, a lo cual se atribuye la mortandad de peces. En áreas rurales es común ver a vecinos recoger recipientes para darle uso doméstico, desconociendo el riesgo de manipular este tipo de tóxicos.
Hace un tiempo, la Dirección Nacional de Medio Ambiente y la ONG Campo Limpio, financiada por empresas del sector, inauguraron dos centros de acopio ubicados en las zonas de mayor producción granelera: Young y Dolores.
«Son centros de primer nivel. Desde la Dinama estamos promoviendo que quien genera contaminación por el empleo de estos envases, se haga responsable de recuperarlos», dijo Alejandro Nario, titular de la Dinama.
Agregó que en el caso de los agroquímicos «es más importante, por los riesgos que el mal manejo puede ocasionar».
El plan para recuperar estos envases «recién está empezando», indicó Nario, recordando que antes «era voluntario y recién desde hace un año y medio es obligatorio».
«Es un proceso que no se hace de un día para el otro. Fíjese lo que significa recoger los envases en todas las chacras donde se utilizan agroquímicos; pero bueno, la Dinama está trabajando fuerte para que eso sea así», explicó el jerarca.
Experiencia.
A 7 kilómetros de Young, sobre Ruta 25, se encuentra uno de los acopios de Campo Limpio. Fue inaugurado oficialmente la semana pasada, pero el equipo de gestión está trabajando allí desde hace cuatro meses.
En ese tiempo llegaron a procesar 35.000 kilos de plástico que equivalen a entre 40 y 45 mil bidones de 20 litros.
«Estamos recibiendo y procesando residuos que llegan en camiones desde Paysandú y hasta de Salto», informó Guillermo Santos, encargado del centro de acopio de Río Negro.
El plástico es picado y se envía a Montevideo donde es reciclado. Las bolsas de silos, cartones y latas son prensadas y lo que sirve es reutilizado por la industria y termina convirtiéndose en baldes, porteras, postes y hasta bancos.
«Esto no tiene costo adicional más que el traslado que corre por cuenta del interesado. Todo lo demás se hace en forma gratuita a través de recursos que recibe la ONG», explicó el responsable.
Desbordados por residuos.
Guillermo Santos, encargado del centro de acopio de envases de fertilizantes y agroquímicos en Young, recordó que cuando empezaron se vieron rápidamente desbordados por la gran cantidad de residuos acumulados durante años. «Nos quedamos sin espacio, pero en una semana pudimos reducir todo eso», dijo el encargado.
