Ni devolución de carros ni fin de las requisas. La intendenta Ana Olivera comunicó ayer que se mantendrá inflexible en los controles y que se pretende poner fin a los vehículos de tracción animal en un plazo de tres años.
«Se han requisado carros indiscriminadamente, no respetando la estructura establecida para realizar la tarea de la clasificación. Hemos planteado algunas diferencias, creemos que hay cosas que están mal», señaló a El País el integrante de la Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos (Ucrus), Walter Rodríguez.
«La respuesta que hemos tenido es que en casos como la circulación de menores en los carros, la requisa se va a seguir haciendo. Lamentablemente, debemos acceder a que se deben hacer esos procedimientos, porque el hecho de circular con menores genera un montón de problemas y riesgos para esos niños, los conductores de los carros y los de automotores», admitió el trabajador.
Por su parte, el prosecretario de la IMM, Jorge Rodríguez, dijo que «la Intendencia lo que ha hecho es ratificar su política general en el tema. Creemos que no es bueno que haya gente trabajando en la clasificación de basura en estas condiciones. Queremos que todos los montevideanos trabajen en condiciones de dignidad. Y hay que superar esta realidad. Por lo tanto, estamos trabajando muy fuertemente en planes de reconversión laboral y de clasificación en `circuitos limpios`».
RECONVERSIÓN LABORAL . Sin embargo, en la Ucrus no existe tanto optimismo con la posibilidad de cambiar el reciclaje por otras fuentes laborales.
«Si se erradican todos los clasificadores de las calles, es imposible que se generen fuentes de trabajo que ocupen a todo este sector en alguna otra rama laboral», dijo el representante de Ucrus, quien opinó que la reunión mantenida ayer con la intendenta y el prosecretario «no colmó las expectativas, porque lo que uno pretendía es que se entregaran todos los carros requisados y que se pare la requisa».
El prosecretario de la Intendencia fue claro al señalar que «mientras no logremos la reconversión laboral a la que esperamos alcanzar en este período de gobierno, la decisión es hacer un control estricto de las normas vigentes. Y eso es lo que estamos haciendo».
«Le comunicamos a Ucrus que si viene un carro manejado por menores, va a ser parado y requisado. Tenemos además un acuerdo con el INAU, con el que nos ponemos inmediatamente en comunicación. Los carros que no estén matriculados en las condiciones que la Intendencia exige para que puedan circular, también van ser requisados», agregó el director municipal.
El jerarca recordó que «con la actual normativa, los carros no pueden circular por 18 de Julio, Avenida Italia, Avenida del Libertador, ni por ninguna de las ramblas de Montevideo. Además, en horarios comerciales no pueden hacerlo por Agraciada a la altura del paso Molino, por 8 de Octubre en la zona de la Unión, ni en algunas zonas de General Flores»
NUEVO CENSO. El prosecretario de la Intendencia dijo ayer a El País que probablemente en dos semanas se podrá iniciar el nuevo censo de recicladores.
Al comparecer la semana pasada ante la Junta Departamental, la directora de Desarrollo Social de la Intendencia, María Sara Ribero, informó que el censo se hará en el marco del proyecto BID de Ciudades Sustentables.
«Estamos trabajando hacia la concreción de un censo -no ya un registro- que nos dé datos exactos, precisos, de la cantidad de gente que realmente vive de la clasificación, y sus perfiles», dijo Ribero, aunque indicó que «en unos meses podremos estar realizándolo».
Por su parte, el edil del Partido Socialista Jorge Buriani explicó que, entre otras cosas, el nuevo censo pretende identificar a los clasificadores por zona de residencia (asentamiento, barrio, servicio, Centro Comunal o Municipio), así como «establecer quiénes clasifican y quiénes recolectan residuos» y «precisar experiencia laboral anterior, formal e informal».
Reciclador pide un trabajo a la IMM
Se recibió en la redacción del diario una carta manuscrita remitida por un reciclador, solicitando a la Intendencia un trabajo «para no salir más a la calle». El texto de la misiva se publica a continuación:
«Estimados escritores del País
Le escribe un resiclador
Ya que no se puede trabajar en la calle, la única erramienta de trabajo para sostener una familia, y con estos fríos los chiquilines me piden la comida, la leche y el pan. No se que voy a ser si me quitan la erramienta de trabajo, no se que voy a ser…
Estoy operado, me falta todo lo de adentro pero igual la salgo a luchar. Yo le pido al gobierno que me alluden para no salir más a la calle. Tengo 7 hijos de muy corta edad.
Le pido un trabajo ya que no puedo hacer fuerza.
Un trabajo por la intendencia para limpiar, si me puede conseguir se lo agradesco mucho de corazón mi familia y yo.
Le paso mi teléfono: 098 10 16 61, 096 74 92 57″.
La carta no lleva firma.