Basura alrededor de un contenedor en Montevideo
La Intendencia de Montevideo (IMM) tiene planeado reorganizar el esquema de recolección de residuos, delegar tareas a los municipios y crear dos centros logísticos para la salida de camiones recolectores, como un modo de mejorar la gestión de los desechos urbanos que tanto dolor de cabeza le han generado a la administración anterior.
El director de Desarrollo Ambiental de la comuna, Óscar Curutchet, expuso este miércoles las líneas de trabajo para este quinquenio en cuanto a la gestión de residuos sólidos urbanos, en el marco de la segunda Expo Ambiental que se llevará a cabo hasta este jueves.
Entre las líneas de trabajo, Curutchet hizo referencia a la modificación de los circuitos que se realizan para recolectar los residuos en la ciudad y habló de la posibilidad de que los municipios empiecen a hacer tareas que por ahora corresponden a la comuna, como por ejemplo el barrido de avenidas o la limpieza de ferias, trabajos que «por sus características», el director de Desarrollo Ambiental consideró que pueden pasar a ser responsabilidad del tercer nivel de gobierno. De este modo, planteó dejar de lado «la mirada de lo que es la chacrita de cada uno» e implementar una visión «integral» del problema.
La limpieza fue uno de los puntos débiles de la gestión de Ana Olivera. Las encuestas de Equipos contratadas por la intendencia daban cuenta de la opinión de quienes viven en la capital y durante varios meses casi la mitad de los encuestados consideraron que la limpieza en la ciudad era «mala o muy mala», según datos a los que accedió El Observador en su momento.
Entre sus objetivos el gobierno departamental se planteó mejorar la higiene y la seguridad laboral de sus funcionarios, uno de los reclamos que la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom) ha marcado con más firmeza en los últimos años. Curutchet puso entre sus planes la creación de dos centros logísticos para la salida de camiones recolectores y acortar los tiempos de circulación, de modo que se eliminarían los cuatro cantones de la ciudad a cargo de la división Limpieza. La idea es que uno esté ubicado al este de la capital y otro hacia el oeste, y que ambos cuenten con instalaciones acordes para alcanzar buenas condiciones de trabajo, como por ejemplo vestuarios para los trabajadores.
El secretario general de Adeom, Facundo Cladera, dijo a El Observador que si bien no estaba al tanto de los planes de la comuna, consideró «muy bueno» el anuncio, puesto que va «acorde con el compromiso del intendente». Sin embargo, expresó que el sindicato se mantendrá cauto hasta tanto dichos «avances» no sean concretados. El sindicato tendrá un encuentro el viernes con Daniel Martínez, en la que espera adentrarse en las propuestas.
Otra de las metas que se planteó el departamento de Desarrollo Ambiental para este quinquenio fue la extensión de la vida útil de la disposición final de residuos de Felipe Cardozo, con la instalación de una planta de transferencias para compactar los desechos y la adquisición de nuevos predios.
La clasificación de residuos en los hogares es otra de las acciones que la comuna quiere impulsar. Si bien en la administración anterior se implementaron medidas para hacerlo, aún gran parte de los ciudadanos todavía no ha incorporado esta práctica. Curutchet recalcó que al seleccionar los desechos en las casas se está eliminando «la riqueza» de la calle y facilita el trabajo de los clasificadores en las plantas de reciclado, que dan empleo a 128 funcionarios.
El director de Desarrollo Ambiental dijo que otra de las líneas que guiarán al quinquenio será la realización de convenios para lograr nuevas plantas de clasificación e ir disminuyendo la el manejo informal de residuos, otro de los temas que ha generado conflicto entre la gestión de Ana Olivera y la Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos (Ucrus).