La Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) lanzará un plan piloto de clasificación de residuos en el barrio Pocitos que limitará la entrada de carritos tirados por caballos a la zona, según manifestó a El Observador uno de los impulsores de la propuesta, el concejal del Municipio CH, Hugo Recalt (Unidad Nacional).
El concejal advirtió que la IMM fiscalizará que los recolectores no ingresen a Pocitos con sus carros. La tarea de fiscalización recaerá sobre la guardia ambiental e inspectores de tránsito.
Si bien la administración municipal planteó algunas propuestas para los problemas de limpieza, el proyecto que será aplicado es una propuesta de la oposición.
La zona delimitada para aplicar el plan piloto de clasificación de residuos está comprendida entre la rambla y las calles Vázquez Ledesma, Ellauri, 26 de Marzo y Luis Alberto de Herrera.
El proyecto atiende a 87 manzanas de la zona de la ciudad con mayor densidad de población.
Los camiones municipales que recolectan la basura llevarán los desechos desde Pocitos a una planta de clasificación de residuos ubicada en otro barrio, indicó Recalt. Allí los hurgadores realizarán la clasificación, sin necesidad de ir al barrio costero a recoger las bolsas.
Si bien el director de Desarrollo Ambiental de la IMM, Juan Canessa, anunció en marzo de este año a la Junta Departamental de Montevideo la construcción de “hasta 16” centros de clasificación a cielo abierto, para disminuir la presencia de hurgadores en la ciudad, todavía no se conoce la ubicación de esos puntos.
Dos semanas atrás, en la reunión que mantuvo el gabinete municipal con la intendenta Ana Olivera, Canessa señaló que la proyección del Plan Pocitos está “avanzada”.
El concejal destacó que la clasificación en las plantas le permitirá a los recolectores tener mayores ingresos por la actividad, ya que venderán los productos a las industrias de forma directa. En la actualidad, los hurgadores venden los materiales reciclables a empresarios mayoristas que los negocian con las industrias.
Dos contenedores
El plan piloto de recolección de residuos en el barrio Pocitos tendrá como aspecto central la clasificación primaria en los hogares. Mediante una campaña de publicidad, la IMM fomentará la separación de los residuos “secos” de los “húmedos”. La administración instalará en la zona un contenedor para cada tipo de desecho.
Además del diálogo con las autoridades de Desarrollo Ambiental de la IMM, Recalt mantuvo contacto con el gremio de clasificadores (Ucrus), al que solicitó que los niños dejen de recorrer la ciudad arriba de los carritos.
También estuvo junto a distintos porteros de los edificios del barrio, que son los encargados de depositar la basura en los contenedores.
El 52% de los montevideanos desaprueba la gestión de limpieza de la IMM, según una encuesta de Equipos que publicó el sábado el diario Últimas Noticias.