ANDRÉS LÓPEZ REILLY
Además de los incendios, hay otro tipo de vandalismo hacia los contenedores de residuos. Una serie de «atentados» ocurridos durante el fin de semana colmaron la paciencia de la intendenta Ana Olivera, que apuntó a móviles políticos.
Desde que Ana Olivera asumió al frente de la Intendencia de Montevideo, los problemas con la limpieza de la ciudad le han ocasionado los principales dolores de cabeza.
Conflictos sindicales y la herencia de escasos recursos materiales (según la administración), junto a la ausencia de un efectivo plan de gestión de residuos (según la oposición), dinamitaron su «plan de impacto» (una bandera electoral) y ponen en jaque a la ciudad.
Pero según la IMM, hay otros factores que atentan contra la limpieza de Montevideo.
El sábado, la intendenta viajaba en ómnibus como una montevideana más por Avenida Italia. Y distendió el rictus al contemplar que algunos de sus planes de mitigación venían manteniendo a raya los contenedores de la zona.
Pero veinticuatro horas después, el panorama era radicalmente distinto: «Normalmente puede haber algunos contenedores sucios, pero nunca cuadras y cuadras de contenedores vacíos con basura alrededor. Esa situación la vimos después de que yo salí en los medios de comunicación a comentar que teníamos un nuevo servicio con tres camionetas para limpiar alrededor de los contenedores; a comentar que habíamos llegado a hacer tres veces Avenida Italia y Bulevar Artigas. La vimos después que yo señalé que habíamos tomado medidas para que no nos pasara lo que ocurrió en Arenal Grande durante las Fiestas», relató Olivera a El País.
«En todas estas áreas de las que hablé en la semana, aparecieron todos los contenedores vacíos y con la basura alrededor», agregó la intendenta.
«CUMPLEAÑOS». Ayer, durante el acuerdo semanal con su gabinete, Olivera dijo que estos atentados fueron «una forma de decirle feliz cumpleaños a la Intendencia», al cumplir un año de gestión en días pasados.
El director de Desarrollo Ambiental, Juan Canessa, agregó: «Hay personas que se piensan que se hace política llenando de basura a los vecinos de Montevideo». En tanto, la intendenta dijo que «en esta guerra declarada a la basura veníamos poniendo un programa que nos venía dando resultado y en la noche de ayer (domingo) nos dieron una gran paliza».
Olivera comentó que le tocó ver frente a La Pasiva de Albo y 8 de Octubre como una persona bajó de un automóvil, sacó rápidamente todo lo que había del contenedor y se fue hablando por teléfono, tomándose un ómnibus después. Aunque en este caso, observó que la persona retiró algo del interior de una bolsa. «Cuando el hombre se iba, llegaron tres niños y adolescentes a seguir revisando, porque estaba toda la basura afuera. Hablé con ellos y volvieron a meter la basura en el contenedor», añadió.
Olivera admitió que «eso pudo haber sido algo aislado», aunque insistió en que lo ocurrido el domingo en Avenida Italia «fue raro, con un comportamiento distinto». «Después de venir controlando en la semana lo que estaba pasando en el entorno de los contenedores, aparecen de buenas a primeras cuadras y cuadras con todos los contenedores sucios», insistió.
En otro orden, Canessa criticó a «empresarios de la taquigrafía y de las clases de portugués» que utilizan los contenedores para hacer publicidad de sus cursos. Y apuntó amenazante: «Los vamos a ir a visitar, pero no para tomar cursos».